El tulipán de montaña (Tulipa wilsoniana), también conocido como tulipán de Wilson, agregará colores sorprendentes a un macizo de flores de principios de primavera o un jardín de rocas. Las especies que se ofrecen en nuestra tienda cautivan con fantásticas flores de color rojo rubí, profundamente coloreadas. Un ojo negro adorna la base de la flor y crea un bonito contraste con los estambres de color amarillo brillante. La disposición y la saturación de los colores hacen que este pequeño y encantador tulipán se asemeje a las flores de amapola, evocando los sueños del verano. Además de los colores, la variedad presentada ofrece todo lo que amamos de los tulipanes botánicos: forma atemporal y encanto de flores individuales, período de floración temprano en abril, durabilidad, longevidad y bajos requisitos de cultivo.
Plante los bulbos de tulipanes de montaña en otoño a una distancia de ocho centímetros (unas tres pulgadas). Esta variedad enana que no crece más de veinte centímetros (ocho pulgadas), tiende a perderse en los macizos de flores cuando se planta en un grupo pequeño. Plántela en grupos de diez a quince plantas o combínela con sus parientes de diferentes colores, como la Gema de Tubergen de color amarillo anaranjado, el Amuleto de bronce de color naranja pastel y la Estrella del Este de color púrpura y dorado. El sitio puede ser soleado o ligeramente sombreado. El tulipán de montaña se naturaliza rápidamente en su sitio y no requiere una excavación frecuente de los bulbos. Es perfecto para macizos de flores, bordes, céspedes, rocallas, paredes, bordes de caminos y cercas.
Un paquete contiene cinco bulbos del tulipán de montaña, de seis a siete centímetros (dos y media a tres pulgadas) de circunferencia. Las instrucciones de cultivo esenciales se pueden encontrar en el paquete.
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